Esta localidad del sureste de Chipre es un antiguo pueblo de pescadores que con el tiempo se ha convertido en un atractivo lugar para el turismo. Es especialmente conocido por sus bonitas playas, el ambiente animado de su coqueto puerto, su patrimonio histórico y por su antiguo monasterio. El curioso Parque de Esculturas que posee la población es un original espacio que cubre veinte mil metros cuadrados alfombrados de obras de arte que tienen el mar como escenario.
