​Descubriendo la belleza del lago Erhai

Nos acercamos al gran gigante asiático. Buscamos una población situada al suroeste del país, una bonita ciudad de la provincia de Yunnan que está considerada de las más multiétnicas de este punto del mundo. Visitamos Dali. Son muchos los tesoros que guarda esta pintoresca urbe declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: sus antiguas puertas, el templo de la Tres Pagodas y muchos otros puntos de interés. Además, Dali está rodeada de un paisaje fascinante formado por imponentes montañas y el hermoso lago Erhai, nuestro protagonista en este viaje. 

El lago Erhai es el segundo lago de agua dulce más grande de la provincia de Yunnan y uno de los más hermosos de China. De grandes dimensiones –unos 250 kilómetros cuadrados-, posee varios islotes e islas, playas, puentes y lugares pintorescos e históricos. El lago ofrece un paisaje fascinante, especialmente cuando la luz solar propicia que se reflejen en el agua los bellos montes Cangshan. 

A lo largo de su orilla se asientan pequeñas aldeas tradicionales de pescadores, cuyos pobladores están dedicados a labores agrícolas. Para ellos, el lago es una de sus grandes fuentes de alimentos. De hecho, desde tiempos inmemoriales utilizan un curioso sistema de pesca que se sirve de los cormoranes. Estas aves son entrenadas para capturar a los peces y llevarlos hasta los pescadores. La fórmula para que el cormorán no se trague a los peces consiste en colocar un aro alrededor de su cuello que impide que puedan engullir al pez. 

Bordeando el lago se encuentran pequeños pueblos y aldeas tradicionales que conservan sus costumbres y su tipismo totalmente intactos. Resulta realmente interesante su visita. También existen algunos islotes salpicando sus aguas. Uno de ellos, quizás el más conocido y popular, es la pequeña isla Putuo, en la que los pescadores sitúan a su diosa protectora. Como agradecimiento, los habitantes de la zona construyeron un pabellón para honrarla. 

El lago Erhai invita a realizar muchas actividades al aire libre. Una de ellas es recorrer su orilla sobre dos ruedas. La antigua ciudad de Dali es un buen lugar para alquilar una bicicleta y dar un buen paseo por los caminos habilitados. Otra atractiva posibilidad es realizar un crucero por el lago. Suelen acercarse a las pequeñas islas y es una forma fascinante de contemplar el increíble paisaje. Además, el lago cuenta con cuatro playas en las que se puede pasar un día divertido disfrutando del agua.