Córcega

Bonifacio es una de las poblaciones más hermosas de Córcega, una isla mediterránea repleta de riquezas naturales increíbles que han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este pequeño pueblo marinero, fundado en el siglo IX, está situado en el extremo sur de la isla y ubicado a sesenta metros de altura. El lugar ofrece unas magníficas vistas desde los acantilados y una deliciosa gastronomía.

Córcega es uno de los destinos mediterráneos menos conocidos y, sin embargo, de los más bellos e interesantes. Saint-Exupéry dijo de la isla: “El sol le hizo tanto el amor al mar que acabaron engendrando Córcega“ . Pero no ha sido el único piropo que ha recibido la isla que vio nacer a Napoleón. Los griegos la llamaron “la sublime” (Kallisté) y los franceses “Isla de belleza” (Ile de Beauté) y también “la perla de Francia”.

Córcega es uno de los destinos mediterráneos menos conocidos y, sin embargo, de los más bellos e interesantes. Saint-Exupéry dijo de la isla: “El sol le hizo tanto el amor al mar que acabaron engendrando Córcega“ . Pero no ha sido el único piropo que ha recibido la isla que vio nacer a Napoleón. Los griegos la llamaron “la sublime” (Kallisté) y los franceses “Isla de belleza” (Ile de Beauté) y también “la perla de Francia”.

En el noroeste de la isla francesa de Córcega se encuentra esta pequeña ciudad en la que destaca su histórica ciudadela, construida por los genoveses en siglo XIII. La catedral, el puerto y el magnífico entorno natural de la población, situada entre el Mediterráneo y altas montañas, son algunos de los atractivos de este punto de la isla.