El ambiente moderno, exquisito y cosmopolita de Tánger rompe con el recogimiento provinciano que hemos dejado en Tetuán. De lo primero queda constancia al observar la expansión de la ciudad, que queda patente en la aparición de nuevos barrios y edificios, que ya se divisan desde el avión, entre los que se encuentran la nueva estación de ferrocarril, en donde se puede tomar un tren que, en pocas horas, nos lleva a Casablanca. Lo segundo, lo podemos constatar en nuestra breve visita por algunos rincones de la ciudad.
Esta ciudad se ha confirmado como la capital del norte de Marruecos. Las playas tangerinas son uno de sus grandes atractivos, con increíble tráfico durante el fin de semana y moderado durante los restantes días.
Este año la Semana Santa llega algo más tarde que otros años, pero la espera está llegando a su fin. De todos modos, aunque muchos han tenido tiempo para decidir a qué destinos viajarán durante estas fechas, algunos recurrirán al último momento para planificar las primeras vacaciones del año y podrán obtener un ahorro considerable si vuelan a lugares como Tánger o Viena.