Villa de Llanes: esencia asturiana en verdes y azules

El Principado de Asturias es una tierra acogedora y sonriente. En el extremo nororiental de este bello territorio, en la llamada Costa Verde Asturiana, nos encontramos con una villa marinera que muestra orgullosa al visitante el conjunto medieval de su centro histórico, un lugar que nos ofrece un paseo lleno de emociones.

Estamos en Llanes, una población bañada por el Cantábrico, risueña y con mucho carácter, en la que nos envuelven cientos de tonalidades verdes y azules y en la que los aromas a buena fabada, rico cachopo, intenso queso de Cabrales y refrescante ‘sidrina’ –alimentos típicos de estas tierras- ya nos están abriendo el apetito.

El paisaje que rodea a esta localidad es espectacular. Merece la pena moverse por la zona y llenar la mirada de parajes fascinantes. Nosotros vamos a quedarnos en su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico-Artístico.

Esta población, una de las más turísticas del norte de España, recibió la denominación de ‘Villa’ en el siglo XIII. De esa misma época es la bella basílica gótica de Santa María del Conceyu, un templo que se construyó por petición de pueblo de Llanes y que fue levantado en la ubicación de una antigua iglesia románica.

De sólida piedra gris y ubicada en el centro de la muralla medieval de esta villa de tradición marinera, fue declarada Basílica Menor por el Papa Pablo VI en la década de los 70 del siglo pasado.

Llanes cuenta con diferentes casas nobles y palacios que bien merecen una parada, como el Palacio de los Duques de Estrada, el de los Marqueses de Gastañaga, el del Cercáu o la Casa de Posada-Herrera que actualmente alberga la Casa de la Cultura de la población. También es un punto de interés el Casino, edificio de inspiración modernista de comienzos del siglo XX.

Pero si algo llama especialmente la atención en el núcleo histórico de Llanes es su torreón medieval, construcción defensiva del siglo XIII que también sirvió de cárcel durante un tiempo.

Por su parte, la muralla medieval de esta localidad asturiana presenta un magnífico estado de conservación. Podemos observarla desde diferentes puntos de la población, pero situándonos en la bonita playa del Sablón es donde la apreciaremos mejor. 

Ya que nos hemos acercado hasta la popular playa del Sablón, céntrico arenal urbano, nada nos gustará más que regalarnos un buen chapuzón. Además, junto a este punto de Llanes se encuentra el paseo de San Pedro, otra de las agradables sorpresas que nos depara la localidad. Este impresionante mirador con vistas al mar Cantábrico está cubierto de un manto de hierba verde que nos invita a pasear descalzos mientras contemplamos el bellísimo entorno que nos rodea.

No queremos dejar este acogedor municipio asturiano sin acercarnos a una de las playas más recónditas y peculiares de la zona: la playa de Gulpiyuri. Se encuentra a unos 15 kilómetros de distancia de Llanes y es una coqueta y pequeña playa de arena blanca que, curiosamente, no tiene salida al mar. Está catalogada de Monumento Natural, tiene unos cuarenta metros de longitud, es semicircular y se encuentra rodeada de acantilados que la esconden en un entorno rocoso y verde que resulta espectacular.

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Autor de las imágenes: Vicente Marquina