​El castillo de la piedra sagrada. Viaje a la capital de la Toscana española

Valderrobres, la capital administrativa de la comarca del Matarraña, al NE de la provincia de Teruel, es una de las poblaciones más bonitas de la geografía española, en tierras aragonesas. A simple vista, para el viajero que la descubre, la motivación de ese primer contacto se centra en la homogeneidad de un casco antiguo, que se acurruca sobre la ladera meridional de una colina, con una fortaleza superior como referente. 

Pero, una vez que traspasa la puerta de San Roque, con el puente de piedra gótico, recibimos la sensación de acceder a otra dimensión, donde el mundo parece haberse paralizado en el tiempo; sus estrechas y empinadas callejuelas y plazoletas, nos llevan hacia la plataforma superior, en donde se halla la iglesia. En ese trayecto tenemos oportunidad de admirar alguna estela discoidal que forma parte de viejos muros, testimonio de un pasado medieval intenso. 

Y, finalmente, la iglesia, joya del gótico levantino; el templo estaba protegida de los vientos y tormentas, desde un ventanuco circular abierto en la parte inferior del campanario, por donde el sacerdote exorcizaba las fuerzas de los elementos; en el interior, formando un pequeño triforio, sobre el lado del Evangelio se abre una secreta capilla, iluminada con una luz plomiza al estar abierta en el sector más frío, a través de un rosetón en triángulo equilátero, que recuerda al ojo de Dios Padre, el gran arquitecto del Universo. 

A través de un pasillo aéreo es posible acceder al castillo, una fortaleza bajomedieval, sin torre, que fue concebida para proteger los poderes de una piedra sagrada, que domina el corazón del patio de armas, y debió de haber tenido palio. Otro punto de energía se encuentra en la cocina, bajo la enorme chimenea; con ello se lograba duplicar el poder nutritivo de los alimentos allí elaborados. 

Junto a la sala donde se mantiene la leyenda de “la mano peluda”, con una galería que conduce directamente al lecho del río Matarraña, se abre en la misma roca lo que fue la mazmorra donde, en otros tiempos, se encerraban a los sacerdotes rebeldes, que eran alimentados sólo con pan y agua. 

Descubre más sobre estos y otros secretos de Valderrobres en el siguiente vídeo del canal “Conocer la historia oculta”: